El Pazo Baión, situado en Villanueva de Arousa, no solo es sólo el pazo más emblemático de toda esta zona gallega debido a su incuestionable belleza arquitectónica sino también por su singular historia. Además de símbolo de la nobleza medieval en Galicia, también lo fue del narcotráfico a nivel nacional. Actualmente, se ha convertido en una de las bodegas más importantes de vino albariño.
Pazo Baión es un enclave vitivínicola, formado por veintidós hectáreas de viñedo, realmente impresionante. Y como tal ha querido ser relanzada por sus nuevos propietarios, Condes de Albarei, quien en el año 2008 adquiría la finca con el objetivo de situarla como una de las bodegas referencia consiguiendo ser considerada en el año 2016 como mejor rincón enoturístico de España.
Su historia se remonta al siglo XVI cuando los famosos señores de Soutomaior, una familia perteneciente a la nobleza, construyó el pazo. Después y tras varias generaciones, también pasaron por ella otras familias importantes como los Sarmiento, los Figueroa o los condes de Priegue. Una historia que ha ido ligada a la labor vinícola y que así recogen diferentes documentos fechados en 1731 que certifican el cultivo de vides en la finca, con total seguridad, viñedos de albariño.
Es a comienzos del siglo XX cuando Don Adolfo Fojo Silva, un acaudalado emigrante gallego retornado de Argentina, compra la propiedad y pone en marcha una ambiciosa reforma del antiguo pazo. Es entonces cuando la finca toma la apariencia que hoy en día sigue conservando: la casa o pazo, la vaquería y la bodega, además de un gran hórreo y un palomar.
Fue en los años 70 cuando los últimos herederos de Don Adolfo Fojo venden el pazo a una sociedad encabezada por el narcotraficante gallego Laureano Oubiña. Es entonces cuando este emblemático lugar se convierte en uno de los símbolos del comercio de la droga en Galicia. Es en 1995 cuando el juez Baltasar Garzón ordena su embargo dentro de la famosa ‘Operación Nécora’ y pasa a manos del Estado.
En 2008 salió a subasta pública y fue adquirido por Condes de Albarei quien se propuso devolver a este lugar el resplandor que antaño había tenido. Eso sí, sin olvidar su impronta vinícola y su más de cinco siglos de historia. Desde entonces, no sólo se ha llevado a cabo una recuperación arquitectónica liderada por César Portela sino también convertir los vinos de la bodega Pazo Baión en una referencia indiscutible dentro de la Denominación de Origen Rías Baixas.
Actualmente, Pazo Baión está abierto al público y puede visitarse gracias a las diferentes actividades enoturísticas que la bodega ha puesto en marcha para dar a conocer no sólo la historia de la finca y sus edificaciones sino también la cuidada elaboración de sus vinos. Además, también se pueden celebrar en ella diferentes eventos convirtiéndole en uno de los lugares más impresionantes de la zona.
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