Tarifa, situada en la provincia de Cádiz, es conocida por ser el punto más meridional de la España peninsular y por su situación estratégica frente al Estrecho de Gibraltar, donde el mar Mediterráneo se encuentra con el Atlántico. La ciudad combina historia, playas extensas, paisajes naturales y un ambiente internacional debido a los deportes de viento que la han convertido en la capital mundial del kitesurf y el windsurf.
Con apenas 20.000 habitantes, Tarifa ofrece un casco histórico peatonal, fortificaciones históricas, playas abiertas y un entorno natural protegido. La ciudad es, además, puerta de entrada a la comarca del Campo de Gibraltar, con vistas al continente africano y a Gibraltar.
El casco antiguo de Tarifa conserva murallas y calles empedradas que recuerdan la importancia defensiva de la ciudad durante la Edad Media. La Puerta de Jerez es el acceso principal al centro histórico y un buen punto para comenzar la visita. Desde aquí se recorren callejuelas estrechas con casas blancas, pequeñas plazas y tiendas artesanales.
Uno de los edificios más importantes es el Castillo de Guzmán el Bueno, construido en el siglo X y reformado en la Edad Media. Su torre ofrece vistas panorámicas de la ciudad, las playas y el Estrecho. En su interior se puede recorrer la historia de la ciudad a través de exposiciones y restos arquitectónicos.


La Iglesia de San Mateo, situada en la plaza principal, mezcla estilos gótico y renacentista. Su ubicación céntrica la convierte en un punto de referencia tanto histórico como turístico. Otras visitas interesantes incluyen los restos de la muralla antigua, algunas casas señoriales y la Casa de la Cultura, donde a menudo se organizan exposiciones y eventos locales.
Tarifa es famosa por sus playas abiertas y extensas, aptas tanto para el baño como para los deportes de viento. La más conocida es Playa de Los Lances, que se extiende varios kilómetros hacia el norte y el sur, con arena fina y dunas protegidas. Aquí se concentran los surfistas, kitesurfistas y windsurfistas, especialmente entre primavera y otoño.

Para quienes buscan tranquilidad, Playa de Valdevaqueros es ideal. Además de practicar deportes acuáticos, se puede disfrutar de paseos largos, observar aves migratorias y contemplar vistas del continente africano en días despejados.

El Parque Natural del Estrecho, a pocos kilómetros, protege una zona de gran valor ecológico, con rutas de senderismo, miradores hacia el mar y presencia de especies como flamencos, halcones y cigüeñas.
La gastronomía de Tarifa combina pescado fresco, productos locales y cocina internacional gracias a la afluencia de visitantes europeos y latinoamericanos. El atún rojo de almadraba, capturado en Barbate, es un producto estrella, presente en tartares, ventrescas y guisos.


Tarifa ofrece un gran ambiente, sobre todo, en verano. Su casco histórico alberga ferias locales, conciertos y festivales de música durante la época estival. Sus calles peatonales permiten pasear tranquilamente, visitar tiendas de artesanía y tomar un café en pequeñas plazas con encanto.
Además, la ciudad es punto de encuentro de viajeros interesados en deportes de viento, ecoturismo y fotografía de naturaleza. Desde los miradores del Castillo de Guzmán o de la Muralla de Tarifa se pueden ver ballenas y delfines en el Estrecho, sobre todo durante la primavera.
Tarifa combina historia, naturaleza y deportes al aire libre de manera única. Sus murallas, castillos y calles blancas conviven con playas extensas y vientos constantes que la convierten en referencia mundial para kitesurf y windsurf.
Deja un comentario